Rumbos distintos

Caminando en el límite
de este abismo mediatico,
entre susurros y gritos
la fortaleza se vuelve una obligación
y las decisiones una necesidad.

Es pertinente
que la fuente se seque
para volver a llenarla.
Es menester alzar los pies
para no llevar polvo
para no arrastrar sobras del pasado.

Eternas son las noches
de quien entre cobijas y luz artificial
buscan en el papel refugio
consuelo para sus penas
y remedios para los tragos amargos y oscuros.

El amor tanto conoce
que se vuelve destructivo y efímero
Es la tripa que expulsa
todo sentimiento mortal y detestable.

La impotencia resumida en tinta,
inundan todo el alma,
los ojos que ya nada ven
y donde desembocan toda frustración.

Noche a noche,
se agota la paciencia
las ganas se dispersan
la fuerza escacea y los sueños...
uno a uno toman rumbos distintos.

Lírica.

-Y es mejor que la realidad se estrelle de frente,
contra tu tren de espejismos.
Así... mejor llevar lágrimas de rabia
y no sonrisas de ilusiones falsas-

Eterno efímero

Invierno elocuente sueles ser
entendible pero detestable
reunes gota a gota emociones fugaces
solo traes madrugadas frías
me haces flotar en misantropía.

Eterno sol asfixiante,
agotador e impaciente
No entiendes de descansos para el alma
no regalas sombra a mis emociones
solo alumbras sin importar nada,
solo existes para ti.

Paciencia y desesperación,
botar todo a la mierda o renacer de la cenizas
pasan los días
entre decisiones
entre emociones
entre buenos y malos ratos.

Eres el antídoto que me crea reacción
Matas de amor, y robas tranquilidad
Te digo adiós pero aún así te llevo conmigo.
Mi corazón no conoce teorías,
solo bombea y bombea...

Espera la muerte de estos días y la vida en sonrisas por la vía.

Desechos Nocturnos

Caminando en el límite
de este abismo mediatico,
entre susurros y gritos
la fortaleza se vuelve una obligación
y las decisiones una necesidad.

Es pertinente
que la fuente se seque
para volver a llenarla.
Es menester alzar los pies
para no llevar polvo
para no arrastrar sobras del pasado.

Eternas son las noches
de quien entre cobijas y luz artificial
buscan en el papel refugio
consuelo para sus penas
y remedios para los tragos amargos y oscuros.

El amor tanto conoce
que se vuelve destructivo y efímero
Es la tripa que expulsa
todo sentimiento mortal y detestable.

La impotencia resumida en tinta,
inundan todo el alma,
los ojos que ya nada ven
y donde desembocan toda frustración.

Noche a noche,
se agota la paciencia
las ganas se dispersan
la fuerza escasea y los sueños...
uno a uno toman rumbos distintos.